En lugar de crema espesa, esta sopa de papas lleva leche evaporada sin grasa para su base. Este solo reemplazo reduce 50 calorías, 10 gramos de grasa y 30 miligramos de colesterol por porción. Esta sopa es una excelente fuente de potasio, calcio y vitamina C.
Rocía una olla con aceite en aerosol. Añade la cebolla, los puerros y las manzanas cortadas en cuatro trozos. Sofríe a fuego medio de 5 a 7 minutos hasta que estén blandos. Añade el caldo de pollo, la hoja de laurel y el tomillo. Deja que hierva, baja el fuego y cocina a fuego lento durante aproximadamente 15 minutos. Retira la hora de laurel. Apaga el fuego y reserva la mezcla.
Mientras la mezcla de caldo se cocina, mezcla la leche evaporada y las papas en otra cacerola. Cocina a fuego medio de 15 a 20 minutos, hasta que las papas estén tiernas. Revuelve con frecuencia. Vierte la mezcla de papas en la olla de la sopa. Revuelve para mezclar bien.
En una licuadora o un procesador de alimentos, haz un puré de la sopa en varias tandas hasta lograr una consistencia suave y añade los cubos de queso brie mientras haces el puré. Nota: la sopa estará caliente. Llena la licuadora o el procesador no más de un tercio para evitar quemaduras.
Vuelve a colocar la sopa hecha puré en la olla y ponla al fuego hasta que se caliente. Viértela con un cucharón en boles individuales y decora con rodajas finas de manzana. Sirve de inmediato.
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