El Dr. Suraj Kapa, cardiólogo de Mayo Clinic, aclara los conceptos erróneos más comunes sobre la taquicardia ventricular.
Soy el Dr. Suraj Kapa, cardiólogo de Mayo Clinic especializado en trastornos del ritmo cardíaco. Hoy, hablaremos sobre una afección llamada taquicardia ventricular. Si uno visita Internet y busca el término taquicardia ventricular, es posible que se preocupe porque la gente te dice, ay, está asociado con la muerte súbita o deberías recibir atención médica urgente. Intentaré aclarar un poco el asunto, y les contaré qué es esta afección y cómo podríamos tratarla.
Las arritmias ventriculares pueden ocurrir en corazones con estructuras normales o anormales. Con esto quiero decir que algunos pacientes no tienen ninguna otra enfermedad cardíaca subyacente, excepto algún tipo de anormalidad en el sistema eléctrico de las cámaras inferiores del corazón, o los ventrículos, que pueden provocar que el corazón no siga el ritmo correcto. Pueden presentarse como latidos adicionales ocasionales, que uno podría experimentar como latidos omitidos, o como un arreglo rápido de latidos que tienen lugar de manera consecutiva, lo que se conoce como taquicardia ventricular. Si el corazón tiene una estructura normal, es poco frecuente que esto derive en un ritmo peligroso y también lo es en caso de que no haya otra enfermedad cardíaca subyacente que contribuya al respecto.
Ahora bien, sin embargo, otros pacientes pueden tener un corazón anormal por otros motivos. Existen diversas razones por las cuales el corazón puede adquirir una estructura anormal, por ejemplo, si la persona sufrió un ataque cardíaco en el pasado o si presenta algún tipo de anormalidad genética que puede haberse heredado de la madre o del padre. También podrías tener algún tipo de trastorno inflamatorio en el corazón, como sarcoidosis o miocarditis. Estos distintos síndromes pueden contribuir a que se generen anomalías eléctricas en la cámara inferior del corazón. En ocasiones, cuando las personas tienen lo que llamamos “sustrato”, o anomalías en la arquitectura normal del corazón, esto puede ocasionar arritmias ventriculares. En estos pacientes, estas arritmias ventriculares pueden resultar mortales.
Sin embargo, cuando se observa la presencia de estas arritmias, debemos adoptar un enfoque sistemático respecto de su evaluación y tratamiento. ¿Qué quiero decir con esto? Cuando hablamos de la evaluación, nuestro objetivo es responder la pregunta: ¿Hay algún otro motivo por el cual ocurrió esto? ¿Fue algún medicamento que tomaste? ¿Hubo algún tipo de anormalidad en tus electrolitos? ¿Tomabas, por algún motivo, otros medicamentos herbales de venta libre que pueden haber contribuido a que tengas esas arritmias? ¿Podrían desaparecer si no hacemos nada?
También intentamos descubrir cuán significativa es la arritmia. ¿Puede ser mortal, o no? Porque no todas lo son. Cuando hablamos de tratamiento, prestamos atención a dos grandes áreas. En aquellos pacientes que no presentan arritmias ventriculares peligrosas, intentamos ofrecerles un tratamiento para mejorar la calidad de vida, o los síntomas, porque algunos pacientes tienen distintos síntomas que pueden atribuirse a estas arritmias, como sensación de latidos omitidos o latidos rápidos, incluso mareos. Sin embargo, tal vez solo te sientas cansado.
Ahora bien, el otro grupo por el que nos preocupamos son aquellos cuyas arritmias pueden ser mortales. En otras palabras, pueden provocar una muerte súbita. En esos pacientes, nos gusta estratificar los riesgos de manera tal de descubrir qué arritmias pueden ser peligrosas y definir cómo proteger a esos pacientes y evitar que mueran de manera repentina.
El pilar fundamental de los tratamientos que pueden verse en Internet es el desfibrilador. Tal vez lo hayas visto en avisos comerciales o en programas televisivos, en los que la gente corre con las almohadillas en la mano, las coloca sobre el paciente y luego le aplica un choque eléctrico. Esta es la función de un desfibrilador en pacientes que presentan los tipos de arritmias ventriculares más riesgosos. Se distribuye por todo el cuerpo y, luego, se realiza básicamente una descarga de electricidad en caso de que el corazón se salga de ritmo para restablecer su ritmo normal. Sin embargo, el desfibrilador no evita la ocurrencia de arritmias, simplemente se trata de una herramienta que permite salvarte la vida en caso de ser necesario.
Existen dos tratamientos fundamentales para evitar la ocurrencia de arritmias . Si no encontramos otra causa que pueda revertirse, podemos suministrarte medicamentos. En ese sentido, hay diversos medicamentos que pueden usarse. Estos medicamentos se conocen como fármacos antiarrítmicos y suelen utilizarse con éxito en el 50 al 60 por ciento de los pacientes. No obstante, pueden tener efectos colaterales y, en algunos pacientes, incluso provocar más arritmias, y, en ocasiones, arritmias más peligrosas que podrían provocar una muerte súbita. Siempre y cuando los pacientes estén debidamente controlados y se dé comienzo al tratamiento con fármacos en forma correcta, es poco probable que esto ocurra.
Gracias por acompañarme hoy para saber más sobre la taquicardia ventricular. En el próximo video, hablaremos en detalle sobre el procedimiento de ablación.