Mira el video de la Dra. Eleanna De Filippis, endocrinóloga de Mayo Clinic, para informarte sobre la resistencia a la insulina.
Hola, soy la Dra. Eleanna De Filippis, endocrinóloga de Mayo Clinic. En este video, hablaremos sobre los conceptos básicos de la resistencia a la insulina. ¿Qué es? ¿Quién puede tener esta afección? Cuáles son los síntomas, y cómo se puede diagnosticar y tratar. Tanto si buscas respuestas para ti como para un ser querido, estamos aquí para darte la mejor información disponible. Para entender qué es la resistencia a la insulina, también conocida como prediabetes, primero debemos hablar de la función de la insulina. Cuando comes alimentos, el cuerpo los convierte en azúcares alimenticios. La insulina es una hormona que libera el páncreas y les indica a las células que se abran y absorban ese azúcar para convertirlo en energía. Si tienes resistencia a la insulina, las células no reaccionan ni se abren, lo que causa un nivel excesivo de azúcar en la sangre. Con el tiempo, el páncreas sigue tratando de regular el nivel de glucosa en la sangre y genera cada vez más insulina hasta que se agota y ya no puede producir grandes cantidades de esta hormona. Como resultado, los niveles de glucosa en la sangre aumentan hasta alcanzar el rango diabético.
¿Quién puede tener esta afección?
Todas las personas pueden presentar resistencia a la insulina. En particular, quienes tienen sobrepeso corren un mayor riesgo en comparación con la población general. El riesgo aumenta aún más si tienes antecedentes familiares de diabetes tipo 2; eres mayor de 45 años; tienes ascendencia africana, latina o indígena estadounidense; fumas o tomas ciertos medicamentos, como esteroides, antipsicóticos y medicamentos para el virus de la inmunodeficiencia humana. También hay otras afecciones asociadas a la resistencia a la insulina, como la apnea obstructiva del sueño, la enfermedad del hígado graso, el síndrome de ovario poliquístico, el síndrome de Cushing y los síndromes de lipodistrofia, un conjunto de afecciones que causan una pérdida anormal de grasa. Por lo tanto, tener demasiado o muy poco tejido graso en el cuerpo puede deberse a la resistencia a la insulina.
¿Cuáles son los síntomas?
En general, las personas que tienen resistencia a la insulina no presentan ningún síntoma, por lo que esta afección suele detectarse durante un examen de salud anual o a través de un análisis de sangre de rutina. Hay algunos signos de la resistencia a la insulina a los que el médico puede prestar atención, como una cintura que mide más de 40 pulgadas (unos 100 cm) en los hombres y más de 35 pulgadas (unos 90 cm) en las mujeres; fibromas blandos o zonas de piel oscura y aterciopelada (lo que se conoce como acantosis nigricans); una lectura de la presión arterial de 130 sobre 80, o superior; un nivel de glucosa en ayunas de 100 miligramos por decilitro o superior; un nivel de glucosa en la sangre de 140 miligramos por decilitro o superior después de la prueba de carga de glucosa; un nivel de hemoglobina glucosilada A1c del 5,7 % al 6,3 %; un nivel de triglicéridos en ayunas superior a 150 miligramos por decilitro; o un nivel de colesterol de lipoproteínas de alta densidad inferior a 40 miligramos por decilitro en los hombres e inferior a 50 miligramos por decilitro en las mujeres.
¿Cómo se diagnostica?
Si el médico detecta estos síntomas, es probable que te haga un examen físico de seguimiento y te indique varios análisis de sangre que miden los niveles de glucosa, o azúcar, en la sangre y la tolerancia a dicha glucosa. O bien, puede indicarte un análisis de sangre más reciente llamado prueba de hemoglobina glucosilada A1c.
¿Cómo se trata?
Es posible revertir la resistencia a la insulina y prevenir la diabetes tipo 2 con cambios en el estilo de vida, medicamentos o ambos en algunos casos. Los cuerpos saludables presentan diferentes formas y tamaños. Bajar de peso con métodos drásticos puede ser peligroso y contraproducente. En su lugar, consulta a un médico o nutricionista sobre la manera de incorporar alimentos saludables, como frutas, verduras, frutos secos, legumbres y proteínas magras, a tus comidas. También considera incorporar el ejercicio y el movimiento a tu rutina diaria de una forma que te haga sentir bien.
¿Qué sigue?
Aunque no siempre es posible revertir la resistencia a la insulina de forma permanente, puedes tomar medidas para ayudar al cuerpo a ser más receptivo a esta hormona. Escucha a tu cuerpo, reduce el estrés, lleva una alimentación saludable y haz actividad física. Si quieres informarte más sobre la resistencia a la insulina, mira nuestros otros videos relacionados o visita mayoclinic.org. Te deseamos lo mejor.