Picazón de la piel (prurito)

Diagnóstico

El diagnóstico de la causa de la picazón en la piel comienza con un examen físico y preguntas sobre tus antecedentes médicos. Si el proveedor de atención médica cree que la picazón en la piel es el resultado de una enfermedad, es posible que te hagan pruebas como las siguientes:

• Análisis de sangre. Un hemograma completo puede ofrecer evidencia de una afección de los órganos internos que te está causando la picazón, como una anemia.
• Pruebas de la función renal y hepática. Los trastornos renales o hepáticos y las afecciones de la tiroides, como el hipertiroidismo, pueden provocar picazón.
• Radiografías de pecho. En una radiografía de pecho se puede observar si tienes ganglios linfáticos agrandados, lo que puede acompañar la picazón en la piel.

Tratamiento

El tratamiento para la picazón en la piel se centra en eliminar la causa de la picazón. Si los remedios caseros no alivian tus síntomas, el proveedor de atención médica puede recomendarte medicamentos recetados u otros tratamientos. Controlar los síntomas de la picazón en la piel puede ser difícil y requerir una terapia a largo plazo. Estas son algunas opciones:

• Cremas y ungüentos con corticoide. Si tu piel está inflamada y sientes picazón, tu proveedor de atención médica puede sugerir que te apliques un medicamento en crema o un ungüento en las zonas afectadas. Luego, puedes cubrir la piel tratada con un material de algodón húmedo. La humedad ayuda a la piel a absorber la crema y tiene un efecto refrescante.

  Si tienes picazón intensa o persistente, el proveedor de atención médica puede recomendar la siguiente rutina para la hora de ir a dormir: báñate con agua tibia durante 20 minutos y, luego, aplica un ungüento de triamcinolona de 0,025 % a 0,1 % sobre la piel húmeda. Esto atrapa la humedad y ayuda a absorber el medicamento. Luego, colócate un pijama. Repite esta rutina a la hora de ir a dormir por varias noches.

• Otras cremas y otros ungüentos. Otros tratamientos que puedes usar para la piel incluyen los inhibidores de la calcineurina, como tacrolimus (Protopic) y pimecrolimus (Elidel). O bien, puedes sentir alivio con anestésicos tópicos, crema de capsaicina o crema de doxepina.
• Medicamentos orales. Los antidepresivos llamados inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina pueden ayudar a aliviar algunos tipos de picazón persistente en la piel. Los ejemplos de inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina incluyen fluoxetina (Prozac) y sertralina (Zoloft). Otra opción es un antidepresivo tricíclico, como la doxepina. Es posible que no notes todos los beneficios que brindan algunos de estos medicamentos hasta 8 a 12 semanas después de comenzar con el tratamiento.
• Fototerapia. La fototerapia consiste en exponer la piel a un tipo específico de luz. Esto puede ser una buena opción para las personas que no pueden tomar medicamentos por vía oral. Probablemente necesites algunas sesiones de fototerapia hasta que la picazón esté bajo control.

Estudios clínicos

Explora los estudios de Mayo Clinic que ensayan nuevos tratamientos, intervenciones y pruebas para prevenir, detectar, tratar o controlar esta afección.

Estilo de vida y remedios caseros

Para el alivio temporal de la picazón, prueba estos métodos de autocuidado:

• Evita elementos o situaciones que te produzcan picazón. Intenta identificar la causa de tus síntomas y evítala. Puede tratarse de ropa de lana, una habitación demasiado calefaccionada, demasiados baños calientes o la exposición a un producto de limpieza.
• Humectar a diario. Aplica humectante hipoalergénico y sin perfume (Cetaphil, entre otros) en la piel afectada al menos una vez al día. Para la piel seca, las cremas y los ungüentos más espesos funcionan mejor que las lociones.
• Trata el cuero cabelludo. Para un cuero cabelludo seco y con picazón, prueba champús medicinales de venta libre que contengan piritionato de zinc (Head & Shoulders, entre otros), ketoconazol (Nizoral, entre otros), sulfuro de selenio (Selsun Blue, entre otros) o alquitrán de hulla (Neutrogena T/Gel, entre otros). Es posible que tengas que probar varios productos hasta encontrar uno que sirva para tu cabello y afección. O bien, quizás te sirva alternar entre productos. No uses un champú medicinal inmediatamente después de un proceso de alisado químico; usa un champú neutralizante.
• Usa cremas, lociones o geles calmantes y refrescantes para la piel. El uso a corto plazo de una crema con corticoide de venta libre puede aliviar temporalmente la picazón y la inflamación de la piel. O bien, prueba una loción de calamina o cremas con mentol (Sarna, entre otros), alcanfor, capsaicina o un anestésico tópico, como la pramoxina (solo para adultos). Mantener estos productos en el refrigerador puede aumentar su efecto calmante. Las cremas corticosteroides no ayudan con la picazón después de una infección de herpes zóster.
• Evita rascarte. Cubre el área donde te pica si no puedes evitar rascarte. Córtate las uñas y, si ayuda, usa guantes cuando duermas.
• Báñate. Usa agua tibia y vierte aproximadamente media taza (100 gramos) de sulfato de magnesio, bicarbonato de sodio o un producto de baño a base de avena (Aveeno, entre otros). Usa un jabón suave (Dove, Olay, Cetaphil) y limita su uso a las axilas y en la ingle. No frotes demasiado fuerte y limita el tiempo del baño. Luego, enjuágate bien, sécate con golpecitos y humecta la piel.
• Reduce el estrés o la ansiedad. El estrés o la ansiedad pueden empeorar la picazón. Muchas personas han descubierto que el asesoramiento, la terapia de modificación de la conducta, la acupuntura, la meditación y el yoga pueden ayudar a reducir el estrés o la ansiedad.
• Prueba con medicamentos orales de venta libre para la alergia. Algunos medicamentos de venta libre para la alergia (antihistamínicos), como la difenhidramina, pueden hacer que te sientas somnoliento. Puede ser de ayuda tomar este tipo de medicamentos antes de irse a dormir si la picazón de la piel interrumpe el sueño. Los antihistamínicos no ayudan con la picazón ocasionada por la infección de herpes zóster.
• Usa un humidificador. Un humidificador puede dar alivio si la calefacción hace que el aire en tu casa sea seco.
• Mantente bien descansado. Dormir bien puede reducir el riesgo de tener picazón en la piel.

Preparación para la consulta

En primer lugar, puedes consultar al proveedor principal de atención médica. O bien, pueden remitirte a un especialista en enfermedades de la piel (dermatólogo).

A continuación, te brindamos información que te ayudará a preparar para la cita médica y saber qué puedes esperar del proveedor de atención médica.

Qué puedes hacer

Haz una lista de los síntomas, junto con el momento en que ocurrieron y cuánto duraron. También anota todos los medicamentos, las vitaminas y las plantas medicinales que uses. O bien, lleva los frascos originales y una lista de las dosis e indicaciones.

Haz una lista de preguntas para hacerle al proveedor de atención médica. Para la picazón en la piel, algunas preguntas que quizás desees hacer son:

• ¿Cuál puede ser la causa de mis síntomas?
• ¿Se necesitan pruebas para confirmar el diagnóstico?
• ¿Cuáles son las otras causas posibles de mis síntomas?
• ¿Mi afección suele ser temporal o crónica?
• ¿Cuál es el mejor plan de acción?
• Tengo otros problemas de salud. ¿Cómo puedo controlar mis afecciones de manera conjunta?
• ¿Cuáles son las alternativas al enfoque principal que me indica?
• ¿Necesito medicamentos con receta médica o puedo usar productos de venta libre para tratar la afección?
• ¿Qué resultados puedo esperar?
• ¿Puedo esperar a ver si la afección desaparece por sí sola sin tratamiento?

No dudes en hacer otras preguntas que tengas.

Qué esperar del médico

Es probable que el proveedor de atención médica comience con tus antecedentes médicos y te haga algunas preguntas, como las siguientes:

• ¿Cuándo comenzaste a tener los síntomas?
• ¿Qué apariencia tenía la piel cuando comenzaron los síntomas?
• ¿Han cambiado los síntomas?
• ¿La picazón interfiere con tus actividades diarias?
• ¿Hay algo que parezca empeorar los síntomas?
• ¿Hay algo que parezca mejorar los síntomas?
• ¿Qué tratamientos caseros has probado?
• ¿Qué medicamentos con receta médica y de venta libre tomas?
• ¿Has viajado recientemente?
• ¿Has nadado o chapoteado en un lago o una laguna últimamente?
• ¿Cuál es tu dieta habitual?
• ¿Estás en contacto con posibles agentes irritantes, como mascotas o ciertos metales, en el hogar o en el trabajo?