Diagnóstico
Para diagnosticar un problema con la sudoración y el olor corporal, tu médico probablemente te preguntará acerca de tu historial médico y te realizará un examen. El médico puede examinar tu sangre u orina. Los exámenes pueden mostrar si el problema es causado por una afección médica, como una infección, diabetes o una tiroides hiperactiva (hipertiroidismo).
Tratamiento
Si te preocupa la sudoración y el olor corporal, la solución puede ser simple: un antitranspirante o desodorante.
- Antisudoral. Los antitranspirantes contienen compuestos a base de aluminio que bloquean temporalmente los poros sudoríparos, lo que reduce la cantidad de sudor que llega a la piel.
- Desodorante. Los desodorantes pueden eliminar el olor, pero no el sudor. Por lo general, son a base de alcohol y vuelven la piel ácida, lo que la hace menos atractiva para las bacterias. Los desodorantes a menudo contienen fragancias perfumadas destinadas a enmascarar los olores.
Si los productos de venta sin receta médica no te ayudan a controlar la sudoración, el médico puede prescribirte un producto más fuerte. Estas son soluciones fuertes que a algunas personas pueden causarles sarpullido, inflamación y picazón en la piel.
Autocuidados
Puedes hacer una serie de cosas por tu cuenta para reducir la sudoración y el olor corporal. Las siguientes sugerencias podrían ser de ayuda:
- Báñate a diario. Bañarse regularmente, en particular, con un jabón antibacteriano, reduce el crecimiento de bacterias en la piel.
- Elige prendas que se adecuen a tus actividades. Para usar a diario, elige telas de origen natural, como algodón, lana y seda. Estas permiten que la piel respire. Para hacer actividad física, podrías optar por telas sintéticas desarrolladas para absorber la humedad de la piel.
- Prueba técnicas de relajación. Ten en cuenta las técnicas de relajación, como el yoga, la meditación o la biorretroalimentación. Estas prácticas pueden enseñarte a controlar el estrés que provoca la sudoración.
- Haz cambios en tu dieta. Las bebidas con cafeína y los alimentos picantes o con olor fuerte podrían hacerte sudar más o tener un olor corporal más fuerte que el habitual. Eliminar esos alimentos podría ser de ayuda.
Preparación para la consulta
Es probable que primero veas al médico de atención primaria. En algunos casos, es posible que cuando llames para programar una consulta te deriven a un especialista en enfermedades de la piel (dermatólogo).
La siguiente información te ayudará a prepararte para la consulta.
Qué puedes hacer
Preparar una lista de preguntas te ayudará a sacar el mayor provecho de tu consulta. En el caso de sudoración y olor corporal, algunas preguntas básicas para hacerle a tu médico son las siguientes:
- ¿Cuáles son las causas más probables de mis síntomas?
- ¿Esta afección suele ser temporal o duradera?
- ¿Qué tratamientos hay disponibles y cuáles podrían ser los más adecuados para mí?
- ¿Existe alguna alternativa genérica al medicamento que me recetas?
Qué esperar del médico
Es probable que el médico te haga varias preguntas, como las siguientes:
- ¿Cuándo comenzaste a tener los síntomas?
- ¿Con qué frecuencia tienes estos síntomas?
- ¿Siempre tienes estos síntomas, o van y vienen?
- ¿Hay algo que parezca mejorar los síntomas?
- ¿Existe algo que, al parecer, esté empeorando los síntomas?