Diagnóstico
Los proveedores de atención médica suelen diagnosticar el herpes zóster basándose en los antecedentes de dolor en un lado del cuerpo, acompañado del sarpullido característico y ampollas. El proveedor de atención médica también puede tomar una muestra de tejido o hacer un cultivo de las ampollas para enviar al laboratorio.
Tratamiento
No hay cura para el herpes zóster. Si se lo trata sin demora con antivirales bajo receta médica se puede acelerar la recuperación y reducir el riesgo de complicaciones. Estos medicamentos comprenden los siguientes:
- Aciclovir (Zovirax)
- Famciclovir
- Valaciclovir (Valtrex)
El herpes zóster puede causar un dolor intenso, por lo que el proveedor de atención médica también podría recetarte:
- Un parche de capsaicina tópica (Qutenza)
- Anticonvulsivos, como la gabapentina (Neurontin, Gralise, Horizant)
- Antidepresivos tricíclicos, como la amitriptilina
- Anestésicos, como la lidocaína, en crema, gel, espray o parche para la piel
- Una inyección que podría ser de corticoides o de anestésico local
Habla con el proveedor de atención médica o el farmacéutico sobre los beneficios y los posibles efectos secundarios de los medicamentos que te receten.
El herpes zóster generalmente dura entre 2 y 6 semanas. La mayoría de las personas contraen herpes zóster solo una vez, pero es posible contraerlo dos veces o más.
Autocuidados
Para aliviar el dolor y la comezón, toma un baño con agua fría o coloca compresas húmedas y frías sobre las ampollas. Asimismo, y si es posible, intenta reducir el estrés en tu vida.
Preparación para la consulta
Puedes comenzar por visitar al proveedor principal de atención médica.
A continuación, encontrarás información que te ayudará a prepararte para la cita médica.
Qué puedes hacer
Cuando programes la cita médica, pregunta si hay algo que debas hacer con anticipación, como el ayuno antes de una prueba determinada. Prepara una lista de lo siguiente:
- Los síntomas, incluso aquellos que no parezcan relacionados con el motivo de la cita médica
- Información personal clave, lo que incluye las situaciones de estrés importantes, cambios recientes en tu vida y antecedentes médicos familiares
- Todos los medicamentos, las vitaminas o los suplementos que tomas y también las dosis
- Preguntas para hacerle al médico
Si es posible, pídele a un familiar o a un amigo que te acompañe para que te ayude a recordar la información que recibas.
Estas son algunas preguntas básicas que puedes hacerle al médico sobre el herpes zóster:
- ¿Cuál puede ser la causa de mis síntomas?
- Además de la causa más probable, ¿cuáles son otras causas posibles de mis síntomas?
- ¿Qué pruebas necesito hacerme?
- ¿Es probable que mi afección sea temporal o crónica?
- ¿Cuál es el mejor plan de acción?
- ¿Cuáles son las alternativas al enfoque primario que me indica?
- Tengo otras afecciones médicas. ¿Cuál es la mejor manera de controlarlas?
- ¿Hay alguna restricción que deba seguir?
- ¿Debería consultar a un especialista?
- ¿Hay folletos u otro material impreso que pueda llevarme? ¿Qué sitios web me recomienda?
No dudes en hacer otras preguntas.
Qué esperar del médico
Es probable que el proveedor de atención médica te haga varias preguntas, como las siguientes:
- ¿Cuándo comenzaron los síntomas?
- ¿Los síntomas fueron continuos u ocasionales?
- ¿Cuál es la gravedad de los síntomas?
- ¿Hay algo que parezca mejorar los síntomas?
- ¿Hay algo que parezca empeorar los síntomas?
- ¿Sabes si alguna vez has padecido varicela?
Qué puedes hacer mientras tanto
Evita todo lo que parezca empeorar los síntomas.