Diagnóstico
Probablemente, el proveedor de atención médica de tu hijo determinará si padece la enfermedad de manos, pie y boca u otro tipo de infección vírica evaluando lo siguiente:
- La edad de tu hijo
- Los síntomas de tu hijo
- El aspecto de las llagas o erupciones de tu hijo
El proveedor de atención médica de tu hijo podría tomar una muestra de garganta o de heces. El proveedor de atención médica de tu hijo mandará las muestras al laboratorio para identificar el virus causante de la enfermedad.
Tratamiento
No hay tratamiento específico para la enfermedad de manos, pies y boca. Por lo general, los síntomas de la enfermedad de manos, pies y boca desaparecen al cabo de 7 a 10 días.
Un anestésico oral tópico puede ayudar a aliviar el dolor de las llagas en la boca. Tomar analgésicos de venta libre que no contengan aspirina, como acetaminofén (Tylenol u otros) o ibuprofeno (Advil, Motrin IB u otros), puede ayudar a aliviar el malestar general.
Autocuidados
Algunos alimentos y bebidas pueden irritar las ampollas de la lengua, la boca o la garganta. Prueba estos consejos para disminuir el dolor en las ampollas que tiene tu hijo. Estos consejos también pueden hacer que comer y beber sea más fácil.
- Chupa paletas heladas o trozos de hielo.
- Toma helado o sorbetes con un poco de lácteo.
- Bebe bebidas frías, como agua.
- Bebe bebidas calientes, como té.
- Evita los alimentos y bebidas ácidos, como las frutas cítricas, las bebidas de fruta y las gaseosas.
- Come alimentos blandos que no requieran masticar demasiado.
Si tu hijo puede enjuagarse la boca sin tragar, dile que lo haga con agua salada y tibia para que lo alivie. Haz que tu hijo se enjuague varias veces al día para aliviar el dolor y la inflamación de las llagas de la boca y la garganta.
Preparación para la consulta
Puedes empezar por llevar a tu hijo al proveedor de atención médica primaria.
A continuación, encontrarás información que te ayudará a prepararte para la cita médica.
Lo que puedes hacer
Cuando programes la cita médica, pregunta si hay algo que debas hacer con anticipación, como el ayuno antes de una prueba determinada. Prepara una lista de lo siguiente:
- Los síntomas de tu hijo, incluidos aquellos que quizás no parezcan relacionados con el motivo de la cita médica
- Información personal clave, lo que incluye las situaciones de estrés importantes, cambios recientes en tu vida y antecedentes médicos familiares
- Todos los medicamentos, las vitaminas u otros suplementos que toma tu hijo, incluidas las dosis
- Preguntas para hacerle al médico de tu hijo
Si es posible, pídele a un familiar o a un amigo que te acompañe para que te ayude a recordar la información que recibas.
Para la enfermedad de manos, pies y boca, estas son algunas preguntas básicas para hacerle a tu proveedor de atención médica:
- ¿Cuál podría ser la causa de los síntomas de mi hijo?
- Además de la causa más probable, ¿cuáles son otras causas posibles de los síntomas de mi hijo?
- ¿Qué pruebas se debe hacer mi hijo?
- ¿Cuál es el mejor plan de acción?
- Mi hijo tiene otras afecciones médicas. ¿Cuál es la mejor manera de controlarlas?
- ¿Qué puedo hacer en casa para que mi hijo se sienta más cómodo?
- ¿Hay alguna restricción que deba cumplir para ayudarlo?
- ¿Hay folletos u otro material impreso que pueda llevarme? ¿Qué sitios web me recomienda?
Qué esperar del médico
Es probable que el proveedor de atención médica te haga varias preguntas, como las siguientes:
- ¿Cuándo comenzaron los síntomas de tu hijo?
- ¿Los síntomas de tu hijo han sido continuos u ocasionales?
- ¿Cuál es la gravedad de los síntomas de tu hijo?
- ¿Tu hijo ha estado expuesto recientemente a otras personas enfermas?
- ¿Oíste hablar de alguna enfermedad en la escuela o en la guardería de tu hijo?
- ¿Hay algo que parezca mejorar los síntomas de tu hijo?
- ¿Hay algo que parezca empeorar los síntomas de tu hijo?
Qué puedes hacer mientras tanto
Evita todo lo que parezca empeorar los síntomas del niño.
Para ayudar a reducir las molestias del niño, los proveedores de atención médica suelen recomendar estos consejos:
- Descansar.
- Beber suficientes líquidos para impedir la deshidratación.
- Evitar fumar cigarrillos y el humo de segunda mano, así como cualquier otra sustancia que pueda irritar la boca y la garganta.