Los cirujanos de Mayo Clinic utilizan muchas técnicas quirúrgicas innovadoras en las cirugías para trasplantes y en otros procedimientos. Mayo ha creado procesos para aumentar la viabilidad de los órganos para trasplantes, lo que ha aumentado el índice de trasplantes para los pacientes en lista de espera.
Los médicos e investigadores de Mayo Clinic continúan estudiando y usando técnicas quirúrgicas y opciones nuevas para controlar el dolor en las personas que han recibido un trasplante. Durante la cirugía, es posible que los médicos te den un anestésico para bloquear el dolor de la incisión, aparte de la anestesia general.
Los cirujanos tienen una amplia experiencia en cirugías para el trasplante de riñón e hígado con donantes vivos. Los trasplantes con donantes vivos suelen ofrecerte alternativas atractivas en comparación con esperar por un órgano de un donante fallecido. Mayo Clinic cuenta con uno de los programas para trasplantes de riñón con donantes vivos más amplios de los Estados Unidos.
También, los cirujanos llevan a cabo cirugías de invasión mínima para extraer el riñón del donante vivo para el trasplante (nefrectomía laparoscópica del donante), mediante pequeñas incisiones. En comparación con una cirugía abierta, la nefrectomía laparoscópica suele implicar menos dolor, una hospitalización más corta y una recuperación más rápida para el donante.
Los investigadores también estudian la relación entre la obesidad y el trasplante de hígado. La obesidad es la principal causa de la insuficiencia hepática. Los cirujanos de Mayo Clinic fueron los primeros en realizar simultáneamente un trasplante de hígado y una manga gástrica laparoscópica, que es un tipo de cirugía bariátrica, en personas con insuficiencia hepática por obesidad. Esta cirugía bariátrica adicional puede evitar la obesidad recurrente, así como la insuficiencia en el hígado trasplantado nuevo.