Descripción general

La neurotomía por radiofrecuencia usa calor creado por ondas de radio para actuar sobre nervios específicos. El tratamiento desactiva la capacidad de los nervios para enviar señales de dolor durante un breve período de tiempo. El procedimiento también se denomina ablación por radiofrecuencia.

Las agujas insertadas a través de la piel cerca del área dolorida aplican las ondas radioeléctricas a los nervios específicos. El médico usará exploraciones de diagnóstico por imágenes durante la neurotomía por radiofrecuencia para asegurarse de que las agujas estén en la posición correcta.

La neurotomía por radiofrecuencia se usa con frecuencia para el dolor en la espalda, el cuello y los glúteos. El tratamiento también puede resultar útil para el dolor crónico en la articulación de la cadera, la rodilla o el hombro.

Por qué se realiza

La neurotomía por radiofrecuencia generalmente es realizada por un proveedor de atención médica que se especializa en el tratamiento del dolor. El objetivo es reducir el dolor crónico de espalda, cuello, cadera o rodilla que no haya mejorado con medicamentos ni con fisioterapia, o cuando no es posible realizar una cirugía.

Por ejemplo, el proveedor de atención médica podría recomendar el procedimiento si el dolor de espalda:

  • Afecta a uno o ambos lados de la región lumbar.
  • Se extiende a los glúteos y muslos (pero no por debajo de la rodilla).
  • Empeora si giras o levantas algo.
  • Mejora cuando estás recostado.

La neurotomía por radiofrecuencia también podría recomendarse para tratar el dolor de cuello asociado al latigazo cervical.

Riesgos

Los efectos secundarios comunes que causa la neurotomía por radiofrecuencia son los siguientes:

  • Entumecimiento temporal.
  • Dolor temporal en el lugar del procedimiento.

En raras ocasiones, pueden presentarse complicaciones más graves, que incluyen:

  • Sangrado.
  • Infección.
  • Daño de los nervios.

Cómo prepararse

Para saber si eres un buen candidato para la neurotomía por radiofrecuencia, es posible que te remitan a un especialista en dolor o que te pidan más pruebas.

Por ejemplo, te pueden hacer una prueba para determinar si los nervios a los que se dirige el procedimiento son los mismos nervios que causan el dolor. Se inyecta una cantidad pequeña de medicamento anestésico en los puntos precisos donde se insertan las agujas de radiofrecuencia. Si el dolor disminuye, es posible que el tratamiento de radiofrecuencia en esos puntos te ayude.

Sin embargo, se podría necesitar un procedimiento diferente para ayudar a tus síntomas específicos.

Lo que puedes esperar

Antes de la neurotomía por radiofrecuencia

Dile a tu médico si tomas medicamentos anticoagulantes. Es posible que tengas que dejar de tomarlos durante un tiempo antes del procedimiento.

Sigue estos pasos:

  • Pídele a otra persona que te lleve a casa.
  • Toma los medicamentos necesarios solo con líquidos claros y hazlo lo más temprano posible. No tomes medicamentos durante dos horas antes del procedimiento.
  • No fumes ni utilices productos a base de tabaco el día del procedimiento.

Durante la neurotomía por radiofrecuencia

La neurotomía por radiofrecuencia es un procedimiento ambulatorio, por lo que podrás irte a casa más tarde ese mismo día.

Te colocas una bata hospitalaria y te recuestas en una camilla para radiografías. Se coloca una vía intravenosa en el brazo o en la mano a fin de administrarte medicamentos para que estés cómodo durante el procedimiento. Se inyectan medicamentos anestésicos en la piel antes de colocar las agujas de radiofrecuencia.

Un fluoroscopio, un aparato especial de rayos X, guía las agujas de radiofrecuencia hasta la zona precisa. Esto garantiza que solo se trate el tejido nervioso objetivo.

Después de la neurotomía por radiofrecuencia

Te trasladarán a otra habitación para que descanses hasta que te sientas listo para regresar a casa. Es posible que sientas dolor en el área donde se insertaron las agujas, pero este suele desaparecer en uno o dos días.

Cuando llegues a tu casa:

  • Coloca una compresa helada sobre el sitio de las inyecciones si sientes alguna molestia. Durante el primer día de la recuperación, coloca la compresa tres o cuatro veces al día durante 20 minutos sobre los lugares con dolor.
  • No coloques una almohadilla térmica sobre el sitio de las inyecciones.
  • No te bañes durante dos días. Puedes darte una ducha con agua tibia 24 horas después del procedimiento.

Resultados

La neurotomía por radiofrecuencia no corrige el dolor de espalda o cuello de manera definitiva.

Los estudios sobre el éxito del tratamiento han sido contradictorios. Algunas personas pueden presentar un alivio modesto a corto plazo mientras que otras pueden sentirse mejor durante varios meses. A veces, el tratamiento no mejora el dolor ni la función en absoluto.

Para que el tratamiento funcione, es importante que los nervios a los que se dirige el procedimiento sean los mismos nervios responsables del dolor.