Descripción general

La laminectomía es una cirugía para extirpar el arco o la parte posterior de una vértebra. Esta parte, también conocida como lámina, cubre el canal espinal. La laminectomía agranda el canal espinal para aliviar la presión sobre la médula espinal o los nervios. La laminectomía suele hacerse como parte de la cirugía de descompresión para aliviar la presión.

La presión en el canal espinal por lo común es causada por crecimientos óseos excesivos en el canal espinal. Estos crecimientos excesivos algunas veces se llaman espolones óseos. Estos crecimientos excesivos son un efecto secundario de la edad y pueden ocurrirles a personas con artritis en sus columnas. Algunas personas son más propensas a tener espolones óseos debido a rasgos genéticos transmitidos en sus familias.

Se suele recurrir a la laminectomía solo cuando los tratamientos más conservadores, tales como medicamentos, fisioterapia o inyecciones, no lograron aliviar los síntomas. La laminectomía también puede recomendarse si los síntomas son graves o si empeoran demasiado.

Por qué se realiza

La excrecencia ósea en las articulaciones de la columna vertebral puede acumularse dentro del canal raquídeo. Puede estrechar el espacio disponible para la médula espinal y los nervios. Esta presión puede causar dolor, debilidad o entumecimiento que puede extenderse hacia los brazos o las piernas.

Dado que la laminectomía restaura el espacio del canal raquídeo, es probable que alivie la presión que causa el dolor que se irradia. Sin embargo, el procedimiento no cura la artritis que causó el estrechamiento. Así que, es probable que no alivie el dolor de espalda.

Un profesional de atención médica podría recomendar la laminectomía en los siguientes casos:

  • El tratamiento conservador, como los medicamentos o la fisioterapia, no mejora los síntomas.
  • Hay debilidad muscular o entumecimiento que causa dificultad para caminar o permanecer de pie.
  • Los síntomas incluyen la pérdida del control intestinal o de la vejiga.

En algunos casos, la laminectomía puede ser parte de la cirugía para tratar una hernia de disco intervertebral. Es posible que un cirujano necesite extirpar parte de la lámina para acceder al disco dañado.

Riesgos

La laminectomía es generalmente segura. Pero, como sucede con cualquier cirugía, se pueden presentar complicaciones. Algunas de las posibles complicaciones son:

  • Sangrado.
  • Infección.
  • Coágulos sanguíneos.
  • Lesión nerviosa.
  • Fuga del líquido espinal.

Cómo prepararse

Tendrás que evitar comer y beber durante cierta cantidad de tiempo antes de la cirugía. Tu equipo de atención médica puede darte instrucciones sobre los tipos de medicamentos que debes tomar y cuáles debes evitar antes de la cirugía.

Lo que puedes esperar

Durante la laminectomía

Los cirujanos suelen realizar una laminectomía con anestesia general, por lo que no estarás consciente durante la cirugía.

El equipo quirúrgico controla tu frecuencia cardíaca, presión arterial y niveles de oxígeno en sangre durante el procedimiento. Después de que entres en un estado similar al sueño y no sientas dolor:

  • El cirujano hace una incisión en tu espalda sobre las vértebras afectadas y hace a un lado los músculos de la columna vertebral, según sea necesario. El cirujano usa pequeños instrumentos para extraer espolones óseos y la cantidad más pequeña de lámina posible. El tamaño de la incisión puede variar según tu afección y las dimensiones del cuerpo. En las cirugías de invasión mínima se suelen hacer incisiones más pequeñas que aquellas hechas en procedimientos abiertos.
  • Si se hace una laminectomía como parte del tratamiento quirúrgico para una hernia de disco, el cirujano también extrae la parte herniada del disco y cualquier parte que se haya desprendido. Este procedimiento se conoce como discectomía.
  • Para una vértebra que se haya desplazado sobre otra o una desviación de la columna vertebral, es posible que sea necesaria una fusión espinal para estabilizarla. Durante la fusión espinal, el cirujano une en forma permanente dos o más de las vértebras después de extraer las articulaciones artríticas. En la cirugía se pueden usar injertos óseos y, si es necesario, bastoncillos y tornillos de metal.
  • Dependiendo de tu afección y tus necesidades, el cirujano puede realizar una cirugía de invasión mínima. Para este procedimiento, el cirujano hace una pequeña incisión y utiliza un microscopio quirúrgico especial.

Después de la laminectomía

Después de la cirugía, te trasladan a una sala de recuperación donde el equipo de atención médica observa si hay complicaciones de la cirugía y la anestesia. También te podrían pedir que muevas los brazos y las piernas. El profesional de atención médica puede recetarte medicamentos para aliviar el dolor en el lugar de la incisión.

Es probable que tengas que quedarte una o dos noches en el hospital. Tu equipo de atención médica podría recomendar fisioterapia después de una laminectomía para mejorar tu fuerza y tu flexibilidad.

Según la cantidad de veces que debas levantar cosas, caminar y sentarte en tu trabajo, es posible que puedas volver a trabajar en unas pocas semanas. Si además te realizaron una fusión espinal, el tiempo de recuperación puede ser mayor.

Resultados

La mayoría de las personas indican una mejora considerable de sus síntomas después de la laminectomía, en especial una disminución del dolor que se extiende hacia las piernas o los brazos. Pero este beneficio puede disminuir a lo largo del tiempo con algunos tipos de artritis. Es menos probable que la laminectomía mejore el dolor en la propia espalda.