Descripción general
El parche anticonceptivo es un tipo de método anticonceptivo que contiene las hormonas estrógeno y progestina. Debes usar el parche para evitar quedar embarazada.
Una vez por semana durante tres semanas, debes colocarte un pequeño parche sobre la piel, es decir que usarás un parche por un total de 21 días. Durante la cuarta semana, no debes usar el parche (esto permite que se produzca el sangrado menstrual).
El parche anticonceptivo funciona de manera similar a las píldoras anticonceptivas combinadas. El parche anticonceptivo impide el embarazo mediante la liberación de hormonas en el torrente sanguíneo que evitan que los ovarios liberen un óvulo (ovulación). Además, el parche anticonceptivo espesa el moco cervical y así evita que el esperma llegue al óvulo.
Necesitarás una receta médica del proveedor de atención médica para usar el parche anticonceptivo. El parche no sirve como protección contra las infecciones de transmisión sexual.
Por qué se realiza
El parche anticonceptivo se utiliza para prevenir el embarazo. Tiene algunas ventajas en comparación con otros tipos de anticonceptivos:
- Elimina la necesidad de interrumpir el sexo para la anticoncepción.
- No necesitas la cooperación de tu pareja para utilizarlo.
- No es necesario cuidarlo diariamente ni tener que recordar tomar una píldora cada día.
- Suministra una dosis constante de hormonas.
- Es más fácil de usar si tienes problemas para tragar píldoras.
- Se puede extraer en cualquier momento, lo que permite recuperar la fertilidad rápidamente.
Sin embargo, el parche anticonceptivo no es adecuado para todas las pacientes. El proveedor de atención médica podría desaconsejar el uso del parche en los siguientes casos:
- Tienes 35 años o más y fumas
- Sufres dolores en el pecho o tienes antecedentes de ataque cardíaco, accidente cerebrovascular o presión arterial alta grave
- Tienes antecedentes de coágulos sanguíneos
- Tienes antecedentes de cáncer de mama, útero o hígado
- Pesas más de 198 libras (90 kilogramos)
- Tienes una enfermedad hepática o migrañas con aura
- Tienes complicaciones relacionadas con la diabetes en los riñones, los ojos, los nervios o los vasos sanguíneos
- Tienes sangrado vaginal sin causa aparente
- Tuviste color amarillento en la parte blanca de los ojos o la piel (ictericia) durante el embarazo o mientras tomabas anticonceptivos hormonales anteriormente
- Estás por someterte a una cirugía importante y no podrás moverte como lo haces habitualmente
- Estás tomando medicamentos o suplementos de hierbas
- Eres sensible a alguna parte del parche anticonceptivo
Además, informa a tu proveedor de atención médica si ocurre lo siguiente:
- Estás amamantando o diste a luz recientemente, tuviste un aborto espontáneo o programado
- Estás preocupada por un nuevo bulto o cambio en la mama en el autoexamen de mamas
- Tomas medicamentos para la epilepsia
- Tienes diabetes o una enfermedad en la vesícula, el hígado, el corazón o los riñones
- Tienes niveles altos de colesterol o triglicéridos
- Tienes menstruaciones irregulares
- Tienes depresión
- Tienes afecciones de la piel, como psoriasis o eczema
Riesgos
Con un uso perfecto, el embarazo se produce en menos de 1 de cada 100 mujeres durante el primer año de uso del parche anticonceptivo. Se estima que las tasas de embarazo son de 7 a 9 de cada 100 mujeres durante un año de uso habitual. Las situaciones de uso habitual podrían incluir olvidarse de cambiar el parche a tiempo o descubrir que el parche se despegó de la piel durante un tiempo prolongado.
El parche anticonceptivo no sirve como protección contra las infecciones de transmisión sexual.
Los efectos secundarios del parche anticonceptivo podrían incluir:
- Aumento en el riesgo de padecer problemas de coagulación, ataque cardíaco, accidente cerebrovascular, cáncer de hígado, enfermedad de la vesícula y presión arterial alta
- Sangrado leve o manchado intermenstrual
- Irritación de la piel
- Sensibilidad o dolor en la mama
- Dolor menstrual
- Dolores de cabeza
- Náuseas o vómitos
- Dolor abdominal
- Cambios de humor
- Aumento de peso
- Mareos
- Acné
- Diarrea
- Espasmos musculares
- Infecciones y secreciones vaginales
- Fatiga
- Retención de líquidos
Algunas investigaciones muestran que el parche anticonceptivo podría aumentar los niveles de estrógeno en el cuerpo en comparación con las píldoras anticonceptivas combinadas que se toman por vía oral. Esto puede significar que existe un riesgo ligeramente mayor de sufrir eventos adversos relacionados con el estrógeno, como coágulos sanguíneos, en quienes usan el parche que en aquellas que toman píldoras anticonceptivas combinadas.
Cómo te preparas
Debes solicitarle a tu profesional de salud una receta para el parche anticonceptivo. Tu profesional de salud revisará tu historia clínica y te medirá la presión arterial. Habla con tu profesional de salud acerca de todos los medicamentos que tomas, incluidos los medicamentos sin receta y los productos de fitoterapia.
Lo que puedes esperar
Para usar un parche anticonceptivo:
- Habla con tu proveedor de atención médica acerca de la fecha de comienzo. Si es la primera vez que utilizas un parche anticonceptivo, espera hasta el día en que comience tu período menstrual. Luego, si eliges comenzar en el primer día de menstruación, debes aplicar el primer parche el primer día de ese periodo. No se necesitan métodos anticonceptivos de refuerzo. Si eliges comenzar un domingo, debes aplicar el primer parche el primer domingo posterior al comienzo de tu período menstrual. Durante la primera semana, utiliza un método anticonceptivo de refuerzo.
- Elige dónde aplicarás el parche. Puedes colocar el parche en los glúteos, en la parte externa superior del brazo, en la parte baja del abdomen o en la parte superior del cuerpo. No lo coloques sobre los senos o en algún lugar con roce, por ejemplo, debajo del bretel del sostén. Aplícalo sobre la piel limpia y seca. Evita las zonas de piel enrojecida, irritada o con cortes. No apliques lociones, cremas, polvos ni maquillaje en el área de piel destinada al parche. Si presentas irritación de la piel, quita el parche y aplica uno nuevo en un sitio diferente.
- Aplica el parche. Abre con cuidado la bolsa laminada. Utiliza las uñas para levantar una esquina del parche anticonceptivo. Despega el parche y el revestimiento plástico de la bolsa; luego, despega la mitad del revestimiento protector transparente. Ten cuidado de no cortar, alterar ni dañar el parche. Aplica la superficie adhesiva del parche sobre la piel y quita el resto del revestimiento protector. Presiona el parche sobre la piel firmemente con la palma de la mano durante unos 10 segundos. Alisa el parche, asegurándote de que los bordes queden bien adheridos. Déjate puesto el parche durante siete días. No te lo quites para bañarte, ducharte, nadar ni para hacer ejercicio.
- Cambia el parche. Aplica un nuevo parche anticonceptivo sobre el cuerpo todas las semanas, el mismo día de la semana, durante tres semanas consecutivas. Aplica cada parche nuevo sobre un lugar diferente de la piel para evitar la irritación. Después de quitar el parche, dóblalo por la mitad con las caras adhesivas enfrentadas y tíralo a la basura. No lo arrojes por el inodoro. Elimina el pegamento que quedó sobre la piel con crema o aceite para bebé.
- Comprueba el estado del parche regularmente para asegurarte de que siga en su sitio. Si el parche se despega en forma parcial o completa y no se puede volver a aplicar, reemplázalo por un nuevo parche de inmediato. No vuelvas a aplicar un parche que ya no se adhiere, que se adhirió sobre sí mismo o sobre otra superficie, o que tiene adherido algún otro material. No utilices otros adhesivos ni envoltorios para mantener el parche en su lugar. Si el parche se despega en forma parcial o completa durante más de 24 horas, aplica un nuevo parche y utiliza un método anticonceptivo de refuerzo durante una semana.
- No utilices el parche durante la semana 4. No apliques un nuevo parche durante la cuarta semana, en el momento del período menstrual. Una vez que termine la cuarta semana, utiliza un nuevo parche y aplícalo el mismo día de la semana que aplicaste el parche en las semanas anteriores.
- Si demoraste en aplicar un nuevo parche, utiliza un anticonceptivo de refuerzo. Si demoraste en aplicar el parche anticonceptivo durante la primera semana, o lo aplicaste con una demora de más de dos días en la segunda o tercera semana, aplica un nuevo parche de inmediato y utiliza un método anticonceptivo de refuerzo durante una semana.
Consulta con tu proveedor de atención médica lo antes posible si tienes:
- Dolor intenso en el pecho, falta de aire repentina o tos con sangre, que pueden ser signos de un coágulo sanguíneo
- Dolor persistente en la pantorrilla u otros signos de un coágulo sanguíneo en la pierna
- Ceguera repentina, parcial o completa, u otros signos de un coágulo sanguíneo en el ojo
- Dolor opresivo en el pecho u otros signos de ataque cardíaco
- Dolor de cabeza intenso y repentino, problemas de visión o habla, entumecimiento en un brazo o pierna, u otros signos de accidente cerebrovascular
- Color amarillento de la piel o en la parte blanca de los ojos, que puede estar acompañado de fiebre, fatiga, falta de apetito, orina oscura o evacuaciones intestinales de color claro
- Trastornos importantes del sueño, fatiga o sentimiento de tristeza
- Dolor abdominal intenso o sensibilidad
- Un bulto en las mamas que persiste entre 1 y 2 ciclos menstruales o que aumenta de tamaño
- Ausencia de dos períodos menstruales u otros signos de embarazo