Esguince: primeros auxilios

Escrito por el personal de Mayo Clinic

Un esguince es una lesión en un ligamento causada por el estiramiento excesivo del ligamento o su desgarro. Un ligamento se puede desgarrar de forma parcial o completa. Los ligamentos son bandas resistentes tipo elásticas que conectan un hueso con otro. Ayudan a sostener las articulaciones en su lugar.

Busca de inmediato atención médica en los siguientes casos:

  • No puedes apoyar peso en la pierna lesionada, la articulación se siente inestable o entumecida, o no puedes usar la articulación. Esto puede significar que el ligamento se desgarró completamente. Cuando estés yendo a ver a tu profesional de atención médica, aplica una bolsa fría.
  • Presentas un cambio de color o líneas de color que se diseminan desde la zona lesionada. Esto puede significar que tienes una infección.
  • Sientes dolor directamente sobre los huesos de una articulación lesionada.
  • Te has vuelto a lesionar una zona en la que has tenido lesiones varias veces en el pasado.
  • Tienes un esguince grave. Retrasar el tratamiento podría derivar en dolor constante e inestabilidad de la articulación.

Las áreas del cuerpo más propensas a los esguinces son los tobillos, las rodillas y las muñecas. Los ligamentos esguinzados suelen inflamarse rápidamente, son dolorosos y pueden causar moretones. A menudo, cuanto mayor es el dolor y la hinchazón, peor es la lesión. En la mayoría de los esguinces leves, puedes comenzar el tratamiento tú mismo.

Para tratar un esguince, intenta el método R.I.C.E, acrónimo en inglés para reposo, hielo, compresión y elevación:

  1. Pon en reposo la zona lesionada. Tu profesional de atención médica podría indicar no poner peso sobre la zona lesionada durante 48 a 72 horas. Es posible que debas usar muletas o que no debas usar la zona esguinzada. Un yeso o aparato ortopédico también puede ser útil al principio.

    Incluso con una lesión como un esguince de tobillo, sueles poder hacer ejercicio con otros músculos para evitar perder musculatura. Por ejemplo, puedes usar una bicicleta fija con manijas móviles. Esto hace trabajar los brazos y la pierna no lesionada.

    Puedes descansar el tobillo lesionado en el apoyapiés. De esta forma, puedes hacer una buena rutina de ejercicios mientras dejas que la lesión en el tobillo sane.

  2. Ponte hielo en la zona. Usa una bolsa fría, un baño de hielo y agua o una manga de compresión llena de agua fría para ayudar a bajar la hinchazón después de una lesión. Pon hielo en la zona en cuanto puedas después de la lesión.

    Pon hielo en la zona durante 15 a 20 minutos, de cuatro a ocho veces al día, durante las primeras 48 horas o hasta que desaparezca la hinchazón. No pongas hielo durante más de 20 minutos por vez. Pon un paño o una toalla fina entre el hielo y la piel. Poner hielo directamente sobre la piel o por mucho tiempo puede dañar el tejido.

  3. Comprime la zona con una envoltura elástica o un vendaje. Mantener presión en la zona podría hacer que la hinchazón baje.
  4. Eleva la zona lastimada. Mantenla elevada sobre una almohada o un almohadón por encima de la altura del corazón siempre que puedas. Esto ayuda a que la hinchazón baje.

Los esguinces pueden tardar de días a meses en sanar. A medida que el dolor y la hinchazón mejoren, comienza a usar suavemente el área lesionada. Tiene que mejorar con el tiempo. Los analgésicos de venta sin prescripción, como el ibuprofeno (Advil, Motrin IB, otros) y el acetaminofén (Tylenol, otros), pueden ayudar a aliviar el dolor.

Debes recuperar la fuerza y la estabilidad en el área lesionada antes de volver a practicar deportes o actividades para estar en forma. Un fisioterapeuta u otro profesional de la medicina del deporte puede enseñarte ejercicios para ayudarte a curar y evitar que vuelvas a lesionarte la zona.

Las causas de los esguinces también pueden producir la rotura de huesos y otras lesiones graves. Consulta a tu profesional de atención médica si el esguince no mejora después de dos o tres días.

Aug. 20, 2024