Diagnóstico
El proveedor de atención médica puede diagnosticar un varicocele mediante una inspección visual del escroto y a través de la palpación. Es probable que te examinen en posición recostada o de pie.
Si el examen es de pie, el proveedor de atención médica puede pedirte que respires profundo, mantengas el aire y hagas fuerza o presión como si fueras a defecar. Esta técnica (maniobra de Valsalva) permite examinar más fácilmente un varicocele.
Prueba por imágenes
Es posible que el proveedor de atención médica te recomiende hacerte una ecografía. La ecografía usa ondas sonoras de alta frecuencia para crear imágenes de las estructuras internas del cuerpo. Estas imágenes pueden usarse para lo siguiente:
- Confirmar el diagnóstico o clasificar el varicocele
- Descartar otra afección como causa posible de los signos o síntomas
- Detectar una lesión u otro factor que obstruya el flujo sanguíneo
Tratamiento
Por lo general, no es necesario tratar el varicocele. En el caso de un hombre que tiene infertilidad, la cirugía para corregir el varicocele puede formar parte del plan de tratamiento para la fertilidad.
En el caso de los adolescentes o los adultos jóvenes (en general, los que no buscan un tratamiento para la fertilidad), el proveedor de atención médica puede sugerir que se realicen revisiones anuales para controlar cualquier cambio. La cirugía puede recomendarse en las siguientes situaciones:
- Un testículo que muestra un retraso de desarrollo
- Conteo bajo de espermatozoides u otras irregularidades en el esperma (normalmente solo se analiza en adultos)
- Dolor crónico que no se alivia con analgésicos
Cirugía
El propósito de la cirugía es sellar la vena afectada para redirigir el flujo sanguíneo hacia las venas saludables. Esto es posible porque otros dos sistemas de arterias y venas suministran circulación sanguínea hacia y desde el escroto.
Los resultados del tratamiento pueden incluir lo siguiente:
- El testículo afectado con el tiempo puede regresar al tamaño esperado. En el caso de los adolescentes, el testículo puede alcanzar los niveles esperados en el desarrollo.
- El conteo de espermatozoides puede mejorar, y las irregularidades del esperma se pueden corregir.
- La cirugía puede mejorar la fertilidad o mejorar la calidad del semen para la fertilización in vitro.
Riesgos de la cirugía
La reparación del varicocele tiene relativamente pocos riesgos, que incluyen los siguientes:
- Acumulación de líquido alrededor de los testículos (hidrocele)
- Recurrencia de varicoceles
- Infección
- Daños en una arteria
- Dolor testicular crónico
- Acumulación de sangre alrededor del testículo (hematoma)
El equilibrio entre los beneficios y los riesgos de la cirugía cambia si el tratamiento es solo para el control del dolor. Es posible que los varicoceles causen dolor, pero la mayoría no. Una persona con un varicocele puede tener dolor testicular, pero es posible que el dolor tenga otra causa, una causa desconocida o aún no identificada. Cuando la cirugía de varicocele se hace principalmente para tratar el dolor, existe el riesgo de que el dolor empeore o de que la naturaleza del dolor cambie.
Procedimientos quirúrgicos
El cirujano puede detener el flujo de sangre a través de la vena testicular al suturar o realizar un clipaje en la vena (ligadura). En la actualidad, comúnmente se usan dos enfoques. Ambos requieren anestesia general y son procedimientos ambulatorios que normalmente te permiten irte a casa el mismo día. Los procedimientos incluyen los siguientes:
- Varicocelectomía microscópica. El cirujano hace una incisión diminuta en la parte inferior de la ingle. Con un microscopio potente, identifica y liga varias venas pequeñas. El procedimiento suele durar de 2 a 3 horas.
- Varicocelectomía laparoscópica. Para realizar el procedimiento, el cirujano usa una cámara de video e instrumentos quirúrgicos conectados a sondas que atraviesan algunas incisiones muy pequeñas en la parte inferior del abdomen. Dado que la red de venas es menos compleja sobre la ingle, hay menos venas para ligar. Por lo general, el procedimiento dura de 30 a 40 minutos.
Recuperación
El dolor de la cirugía generalmente es leve, pero podría continuar durante varios días o semanas. El médico podría recetar analgésicos durante un período limitado después de la cirugía. Más adelante, tal vez recomiende analgésicos de venta libre, como acetaminofén (Tylenol y otros) o ibuprofeno (Advil, Motrin IB u otros), para aliviar las molestias.
Es probable que puedas regresar al trabajo una semana después de la cirugía y reanudar la actividad física dos semanas después de la cirugía. Pregúntale al cirujano cuándo puedes volver a hacer tus actividades diarias con seguridad o cuándo puedes tener relaciones sexuales.
Alternativa a la cirugía: embolización
Este procedimiento consiste, básicamente, en obstruir una vena mediante la creación de un pequeño dique. Un médico especializado en imágenes (radiólogo) inserta un pequeño tubo en una vena de la ingle o del cuello. En el sitio de inserción, se coloca un anestésico local y es posible que te den un sedante para reducir la molestia y para que te relajes.
Con las imágenes del monitor como guía, se lleva el tubo hasta el sitio de tratamiento en la ingle. El radiólogo coloca espirales o una solución que provoca cicatrices para crear una obstrucción en las venas testiculares. El procedimiento dura alrededor de una hora.
El período de recuperación es breve y con dolores leves. Es probable que puedas regresar al trabajo en 1 o 2 días y reanudar la actividad física en aproximadamente una semana. Pregúntale al radiólogo cuándo podrás volver a hacer todas tus actividades.
Estilo de vida y remedios caseros
Si tienes un varicocele que te produce molestias leves, pero no afecta tu fertilidad, puedes probar lo siguiente para aliviar el dolor:
- Tomar analgésicos de venta libre, como acetaminofén (Tylenol, otros) o ibuprofeno (Advil, Motrin IB, otros).
- Sujetar el escroto con un suspensorio o calzoncillos ajustados.
Preparación para la consulta
Un varicocele que no causa dolor ni molestias, lo cual es común, puede diagnosticarse durante un examen de bienestar de rutina. También puede diagnosticarse durante un proceso de diagnóstico más complejo para el tratamiento para la fertilidad.
Si sientes dolor o molestias en el escroto o la ingle, debes estar preparado para responder las siguientes preguntas:
- ¿Cómo describirías el dolor?
- ¿Dónde lo sientes?
- ¿Cuándo comenzó?
- ¿Hay algo que alivie el dolor?
- ¿Es constante o intermitente?
- ¿Tuviste alguna lesión en la ingle o en los genitales?
- ¿Qué medicamentos, suplementos alimentarios, vitaminas o remedios herbarios tomas habitualmente?