Diagnóstico
El proveedor de atención médica puede diagnosticarte alergia al sol observándote la piel. Es posible que debas someterte a algunas pruebas, como las siguientes:
- Análisis de exposición a la radiación ultravioleta. Este examen, también llamado “fotoprueba”, se usa para ver cómo reacciona la piel a la luz de una lámpara especial. Esto puede ayudar a identificar el tipo de alergia al sol que tienes.
- Prueba del fotoparche. Esta prueba muestra si la causa de la alergia al sol es una sustancia sensibilizadora que se aplica en la piel antes de la exposición solar. Durante la prueba, se aplican sobre la piel parches idénticos de varios desencadenantes comunes de la alergia al sol, por lo general, en la espalda. Al día siguiente, una de las zonas se expone a una dosis medida de rayos ultravioletas que provienen de una lámpara de luz solar. Si ocurre una reacción solo en la zona expuesta a la luz, probablemente tenga relación con la sustancia que se está analizando.
- Análisis de sangre y muestras de piel. Es posible que el proveedor de atención médica te pida que te hagas estos análisis si los síntomas podrían deberse a una afección subyacente, como el lupus. Durante estos análisis, se toma una muestra de sangre o de piel (biopsia) que luego se examina en un laboratorio.
Tratamiento
El tratamiento para la alergia al sol depende del tipo que tengas y de los síntomas. Para los síntomas leves, es posible que necesites simplemente evitar el sol durante unos días.
Medicamentos
Las cremas con corticoides están disponibles en concentraciones de venta con y sin receta médica. Para una reacción grave, es posible que el proveedor de atención médica te indique tomar pastillas con corticoide bajo receta médica, como la prednisona, durante un breve período.
La hidroxicloroquina (Plaquenil), un medicamento contra la malaria, puede aliviar los síntomas de algunos tipos de alergias al sol.
Fototerapia
Si tienes una alergia al sol grave, es posible que el proveedor de atención médica te sugiera que vayas acostumbrando la piel a la luz del sol progresivamente cada año a medida que los días van siendo más largos. En la fototerapia, se utiliza una lámpara especial para iluminar con luz ultravioleta las áreas del cuerpo que, con frecuencia, están expuestas al sol. Por lo general, se hace varias veces a la semana durante varias semanas.
Estilo de vida y remedios caseros
Estas medidas pueden ayudar a aliviar los síntomas de la alergia al sol:
- Evita la exposición al sol. La mayoría de los síntomas de la alergia al sol mejoran en menos de uno o dos días si no expones la piel afectada al sol.
- Suspende el uso de medicamentos que provocan sensibilidad a la luz. Si tomas medicamentos para otras afecciones, habla con el proveedor de atención médica sobre la posibilidad de suspenderlos si provocan que la piel esté más sensible al sol.
- Aplica humectantes. Las lociones humectantes para la piel pueden ayudar a aliviar la irritación causada por la piel seca y escamosa.
Preparación para la consulta
En primer lugar, puedes consultar a tu proveedor principal de atención médica. Sin embargo, es posible que cuando llames para pedir una cita, te deriven a un médico que se especialice en afecciones de la piel (dermatólogo).
Al momento de programar la cita médica, asegúrate de preguntar si necesitas hacer algo con anticipación. Por ejemplo, si vas a hacerte análisis para comprobar las reacciones a la luz ultravioleta (fotoprueba), podría ser necesario que antes dejes de tomar algún medicamento.
Lo que puedes hacer
Antes de la consulta, sería conveniente que hagas una lista de respuestas a las siguientes preguntas:
- ¿Cuánto tiempo después de la exposición al sol comenzaron los síntomas?
- ¿Qué tipo de síntomas presentaste?
- ¿Los síntomas han empeorado o mejorado?
- ¿Has tenido estos tipos de síntomas antes?
- ¿Qué medicamentos y suplementos tomas con regularidad?
Qué esperar de tu médico
Es probable que el proveedor de atención médica te haga algunas preguntas. Estos son algunos ejemplos:
- ¿Qué partes del cuerpo están afectadas?
- Más precisamente, ¿cómo luce la piel afectada?
- ¿Cuál es la gravedad de los síntomas?
- ¿Cuánto dura la reacción en tu piel?
- ¿Tienes picazón o dolor?
- ¿La piel reacciona solo a la luz solar directa o también a la luz solar que entra por el vidrio de la ventana?
- ¿Hay alguien más en tu familia que sufra reacciones cutáneas a la luz solar u otras afecciones alérgicas de la piel?
- ¿Qué productos usas en la piel?