Descripción general

La distrofia de Fuchs es una afección en la que se acumula líquido en la córnea, que es el tejido transparente de la parte delantera del ojo. Esto hace que la córnea se hinche y engrose, lo que causa deslumbramiento, visión borrosa o nublada y malestar en el ojo.

Los síntomas de la distrofia de Fuchs suelen afectar ambos ojos. Puede causar que tu visión empeore con el tiempo. Esta afección suele aparecer a los 30 o 40 años, pero muchas personas con distrofia de Fuchs no manifiestan síntomas hasta los 50 o 60.

Algunos medicamentos y las medidas de cuidado personal permiten aliviar los síntomas de la distrofia de Fuchs. Cuando la afección avanzada causa problemas de visión más graves, la cirugía para el trasplante de córnea es la mejor forma de recuperar la visión.

Síntomas

A medida que la distrofia de Fuchs empeora, los síntomas suelen afectar ambos ojos. Los síntomas pueden incluir los siguientes:

  • Visión borrosa o nublada, que a veces se describe como una falta de visión clara.
  • Cambios en la visión a lo largo del día. Los síntomas empeoran por la mañana al levantarse y mejoran lentamente a lo largo del día. A medida que la enfermedad empeora, la visión borrosa puede tardar más en mejorar o no mejora en absoluto.
  • Deslumbramiento, que puede disminuir tu visión y convertirla en luz tenue y brillante.
  • Visualización de halos alrededor de las luces.
  • Dolor o arenilla por pequeñas ampollas en la superficie de la córnea.

Cuándo debes consultar a un médico

Si tienes alguno de estos síntomas y, en especial, si empeoran con el tiempo, consulta a un profesional de atención médica de la vista. El profesional de atención médica de la vista.puede remitirle a un especialista en córnea. Si los síntomas se manifiestan repentinamente, pide una cita de urgencia. Otras afecciones oculares que causan los mismos síntomas son la distrofia de Fuchs que también requiere tratamiento inmediato.

Causas

Las células que recubren el interior de la córnea se denominan células endoteliales. Estas células ayudan a mantener un equilibrio saludable de líquido dentro de la córnea y evitan que se hinche. Con la distrofia de Fuchs, las células endoteliales mueren lentamente o no funcionan bien, lo que causa la acumulación de líquido dentro de la córnea. La acumulación de líquido, denominada edema, causa el engrosamiento de la córnea y la visión borrosa.

La distrofia de Fuchs también suele ser hereditaria. La base genética de la enfermedad es compleja. Los miembros de la familia pueden estar afectados en distintos grados o no estarlo en absoluto.

Factores de riesgo

Algunos factores que aumentan la probabilidad de desarrollar distrofia de Fuchs son los siguientes:

  • Sexo. La distrofia de Fuchs es más común en las mujeres que en los hombres.
  • Genética. Tener antecedentes familiares de distrofia de Fuchs aumenta tu riesgo.
  • Edad. Existe un tipo poco frecuente de distrofia de Fuchs de aparición temprana que comienza en la infancia. La mayoría de los casos comienzan a los 30 o 40 años, pero muchas personas con distrofia de Fuchs no manifiestan síntomas hasta los 50 o 60.