Diagnóstico
El especialista en los ojos te hará preguntas sobre los factores que podrían ocasionar los síntomas. Es posible que le hagan un examen ocular durante la visita, incluida una prueba de visión.
Tratamiento
Generalmente, el tratamiento de la fatiga ocular consiste en hacer cambios en tus hábitos diarios o en el ambiente. Es posible que algunas personas necesiten tratamiento para una afección ocular subyacente.
En algunas personas, el uso de anteojos graduados para actividades específicas, como usar una computadora o leer, ayuda a reducir la fatiga ocular. Es posible que tu especialista oftálmico te sugiera descansar los ojos con regularidad para que puedan enfocar a diferentes distancias.
Estilo de vida y remedios caseros
Ten en cuenta estos consejos para reducir o prevenir la fatiga ocular.
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Ajusta la iluminación. Cuando mires televisión, mantener la habitación iluminada tenuemente puede ser mejor para tus ojos.
Cuando leas material impreso o cuando realices un trabajo que requiera mirar de cerca, intenta colocar la fuente de luz detrás de ti y dirigir la luz hacia la página o tarea. Si lees en un escritorio, usa una lámpara con pantalla que esté frente a ti. La pantalla evitará que la luz te dé directamente en los ojos.
- Toma descansos. Cuando leas o hagas un trabajo que requiera mirar de cerca, haz pausas de vez en cuando y descansa la vista mirando lejos de la página, la pantalla digital o la tarea.
- Limita el tiempo frente a las pantallas. Esto es especialmente importante en el caso de los niños, que quizás no establezcan la relación entre la exposición prolongada, la fatiga ocular y la necesidad de descansar la vista con regularidad.
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Usa lágrimas artificiales. Las lágrimas artificiales de venta libre pueden ayudar a prevenir y aliviar los ojos secos. Úsalas incluso cuando los ojos estén bien para mantenerlos lubricados y prevenir una reaparición de los síntomas.
Tu especialista en atención oftálmica puede indicarte cuáles son las mejores gotas para ti. Evita las gotas para quitar el enrojecimiento en los ojos, ya que pueden empeorar los síntomas del ojo seco.
Puedes usar las gotas lubricantes que no posean conservantes las veces que lo necesites. Si usas gotas lubricantes que contengan conservantes, es posible que desarrolles sensibilidad a estos si las aplicas más de cuatro veces al día. Si esto ocurre, cambiar a gotas para los ojos sin conservantes puede ayudar. Sin embargo, no las apliques más de cuatro veces al día.
- Mejora la calidad del aire del lugar. Algunos cambios que pueden prevenir los ojos secos comprenden el uso de un humidificador cuyo termostato se pueda ajustar para reducir el soplado de aire, y evitar el humo. Si fumas, considera dejar de hacerlo. Mover la silla a una zona diferente puede ayudar a reducir la cantidad de aire seco que se dirige a tus ojos y tu cara.
- Usa los anteojos adecuados para ti. Si trabajas con una computadora y necesitas anteojos o lentes de contacto, considera invertir en aquellos especialmente diseñados para este tipo de trabajo. Pregúntale al optometrista sobre el recubrimiento y los tintes para lentes, que también puedan ayudar.
Consejos para trabajar en la computadora
El uso de computadoras es una causa común de la fatiga ocular. Si trabajas en un escritorio y usas una computadora, estas medidas de cuidado personal pueden ayudarte a aliviar un poco la fatiga ocular.
- Pestañea seguido para refrescar los ojos. Muchas personas pestañean menos de lo habitual cuando trabajan con una computadora, lo que puede contribuir a la sequedad ocular. Pestañear produce lágrimas que humedecen y refrescan los ojos. Trata de adoptar la costumbre de pestañear con más frecuencia cuando miras un monitor.
- Descansa los ojos. A lo largo del día, quita la vista del monitor para descansar la vista. Prueba la regla 20-20-20: cada 20 minutos, mira objetos que estén a unos 20 pies (unos 6 metros) de distancia durante, al menos, 20 segundos.
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Revisa la iluminación y reduce los reflejos. La luz brillante y el reflejo excesivo pueden cansar los ojos y dificultar la visualización de objetos en el monitor. Por lo general, los peores problemas provienen de fuentes que están por encima de la altura de los ojos o detrás de ti, incluidas la iluminación fluorescente y la luz solar. Considera apagar algunas, o incluso todas, las luces del techo.
Si necesitas luz para escribir o leer, utiliza una lámpara de escritorio ajustable. Cierra las persianas o cortinas y evita colocar el monitor directamente frente a una ventana o una pared blanca. Coloca un recubrimiento antirreflejo sobre la pantalla.
- Ajusta el monitor. Coloca el monitor directamente frente a ti, aproximadamente a un brazo de distancia, de tal manera que la parte superior de la pantalla esté al nivel de los ojos o justo por debajo. También resulta útil tener una silla que puedas regular.
- Usa un soporte para sostener documentos. Si necesitas consultar material impreso mientras trabajas en la computadora, colócalo en un soporte para documentos. Algunos soportes están diseñados para colocarse entre el teclado y el monitor; otros se colocan al costado. Encuentra uno que te resulte conveniente. El objetivo es reducir el reajuste de los ojos y la frecuencia con la que giras el cuello y la cabeza.
- Ajusta la configuración de la pantalla. Agranda el tipo de letra para que te resulte más fácil leer. Ajusta el contraste y el brillo a un nivel que te resulte agradable.
Medicina alternativa
Algunos síntomas de la fatiga ocular pueden aliviarse con productos naturales, como los ácidos grasos omega-3 del aceite de pescado, pero es necesario realizar una investigación más profunda. Si estás considerando utilizar suplementos para ayudar a aliviar los síntomas, consulta con tu especialista en atención oftálmica.
Preparación para la consulta
Si tienes molestias en los ojos, dolor de cabeza o cambios en la visión que no mejoran con tus propios cuidados, haz una cita médica con un oftalmólogo.
A continuación, encontrarás información que te ayudará a prepararte para la cita médica.
Lo que puedes hacer
- Anota los síntomas que hayas tenido y su duración.
- Haz una lista con tu información médica clave que incluya tanto otras enfermedades como medicamentos, vitaminas y suplementos que tomes.
- Lleva un registro diario de la cantidad de tiempo que hagas actividades que te fatiguen los ojos, como mirar dispositivos digitales, leer o estar expuesto al resplandor.
- Haz una lista de las preguntas que quieras hacer durante la cita médica. Preparar una lista de preguntas puede ayudarte a aprovechar al máximo el tiempo.
Estas son algunas preguntas básicas para la fatiga ocular:
- ¿Cuál puede ser la causa de mis síntomas?
- ¿Cuáles son otras causas posibles?
- ¿Necesito alguna prueba para confirmar el diagnóstico?
- ¿Qué enfoque de tratamiento me recomienda?
- ¿Qué cambios puedo realizar en mi hogar o en mi lugar de trabajo, lo que incluye el escritorio del computador, para ayudar a reducir los síntomas?
- ¿Qué otras medidas de cuidado personal me podrían ayudar?
- ¿Necesito regresar para una cita de seguimiento?
Qué esperar de tu médico
Es probable que el especialista en atención oftálmica te haga una serie de preguntas, como las siguientes:
- ¿Qué síntomas tienes?
- ¿Cuándo los notaste por primera vez?
- ¿Han cambiado con el tiempo?
- ¿Cuál es la intensidad de tu molestia?
- ¿Usas una computadora? Si es así, ¿cómo está dispuesta?
- ¿Trabajas en un ambiente con aire acondicionado, o algún ventilador o ventilación tiran aire cerca de tu rostro?
- ¿Cuánto tiempo por día utilizas dispositivos digitales?
- ¿Hay algo en particular que parezca desencadenar tus síntomas?
- ¿Existe algo que ayude a aliviar los síntomas?
- ¿Cuándo se te hizo el último examen de la vista?