Diagnóstico

El diagnóstico de ameloblastoma podría comenzar con pruebas como las siguientes:

  • Pruebas por imágenes. Las radiografías, las tomografías computarizadas y las resonancias magnéticas ayudan a los médicos a determinar la extensión de un ameloblastoma. El tumor a veces se puede detectar en radiografías de rutina en el consultorio del dentista.
  • Prueba de tejidos. Para confirmar el diagnóstico, los médicos pueden extraer una muestra de tejido o de células y enviarla a un laboratorio para que se la analice.

Tratamiento

El tratamiento del ameloblastoma dependerá del tamaño y de la ubicación del tumor, y del tipo y de la apariencia de las células implicadas. El tratamiento puede incluir lo siguiente:

  • Cirugía para extirpar el tumor. En general, el tratamiento del ameloblastoma incluye cirugía para extirpar el tumor. El ameloblastoma a menudo crece hacia el hueso maxilar cercano, por lo que es posible que los cirujanos tengan que extirpar la parte afectada del hueso maxilar. Un enfoque agresivo de la cirugía reduce el riesgo de que el ameloblastoma vuelva a aparecer.
  • Cirugía para reparar la el hueso maxilar. Si la cirugía implica la extirpación de parte del hueso maxilar, los cirujanos pueden repararlo y reconstruirlo. Esto puede ayudar a mejorar el aspecto y el funcionamiento del hueso maxilar luego del procedimiento. La cirugía también puede ayudarte a poder comer y hablar.
  • Radioterapia. Es posible que se necesite radioterapia con rayos de energía de alta potencia luego de una cirugía o si la cirugía no es una opción.
  • Prótesis. Los especialistas, llamados prostodoncistas, pueden hacer reemplazos artificiales de dientes faltantes u otras estructuras naturales dañadas en la boca.
  • Atención médica de apoyo. Diversos especialistas pueden ayudarte a resolver los problemas para hablar, tragar y comer durante el tratamiento y después de él. Entre estos especialistas, se incluyen dietistas, terapeutas del habla y del lenguaje y fisioterapeutas.

Debido al riesgo de recurrencia después del tratamiento, las citas de seguimiento regulares y de por vida son importantes.