El dolor de testículo aparece en uno o ambos testículos o en la zona que los rodea. A veces, empieza en otra zona de la ingle o el estómago y se siente en uno o ambos testículos. Esto se denomina dolor referido.

Existen muchas causas para el dolor de testículo. Los testículos son muy sensibles. Incluso una lesión menor puede causar dolor. El dolor puede provenir del testículo mismo, o bien del epidídimo que está compuesto por el conducto espiral y el tejido de sostén detrás del testículo.

Muchas veces, lo que parece ser dolor de testículo es producto de un problema que comienza en la ingle, el estómago u otra zona. Por ejemplo, los cálculos renales y algunas hernias pueden causar dolor de testículo. Otras veces, no se puede hallar la causa de este dolor. Puede que conozcas esto como dolor testicular idiopático.

El dolor de testículo repentino e intenso puede ser un síntoma de la torsión de uno de ellos, que rápidamente puede perder su suministro de sangre. Esta afección se denomina torsión testicular. Se necesita tratamiento inmediato para evitar perder el testículo. La torsión testicular se puede presentar a cualquier edad, pero es más común en los adolescentes.

Busca atención médica de inmediato si presentas los siguientes síntomas:

  • Dolor intenso y repentino en el testículo
  • Dolor testicular acompañado de náuseas, fiebre, escalofríos y sangre en la orina

Programa una cita con un profesional de atención médica si tienes lo siguiente:

  • Dolor leve en el testículo que dura más de unos días
  • Un bulto o hinchazón en un testículo o en las zonas que lo rodean

Autocuidado

Estas medidas pueden ayudarte a aliviar un dolor testicular leve:

  • Toma un analgésico como aspirina, ibuprofeno (Advil, Motrin IB, entre otros) o acetaminofén (Tylenol, entre otros). Puedes tomarlos, a menos que tu equipo de atención médica te haya dado otras indicaciones. Ten cuidado cuando administres aspirina a niños o adolescentes. La aspirina está aprobada para niños mayores de 3 años. Sin embargo, los niños y adolescentes que se están recuperando de la varicela o de síntomas parecidos a los de la gripe nunca deben tomar aspirina. Esto se debe a que, en estos niños, la aspirina se ha vinculado con una afección grave, aunque infrecuente, que se conoce como síndrome de Reye. Puede ser mortal.
  • Usa un suspensorio para sujetar el escroto. Cuando estés recostado, usa una toalla doblada como apoyo para elevar el escroto. También puedes aplicar una compresa de hielo o hielo envuelto en una toalla.
Dec. 07, 2023